Nada vuelve a ser lo que era

Si ahora pudiese cambiar algo,
lo cambiaría a él.
No por alguien más,
sino por el del pasado;
el que sonreía en las mañanas
y me cubría con besos somnolientos en las madrugadas,
aquel que se valía de las treguas más bobas
para evitar las discusiones.
Pero nada vuelve a ser lo que era,
ni siquiera los besos que das con ojos cerrados
haciéndole el amor al pasado.
Huele igual
Luce igual
Hasta besa igual
Pero no es él…
Lo peor es que siempre quieres volver, así él ya no este.
   Lm.

No hay comentarios:

Con la tecnología de Blogger.